RELATOS BREVES / Micro-utopías es un proyecto multidisciplinario e híbrido, resultado de un largo proceso que comenzó en 2019 con una residencia llevada a cabo en el Laboratorio Artístico de San Agustín, un espacio de arte contextual situado en la periferia de La Habana.
Por Mariella Sola
En una relación directa con la realidad, la cámara de video se ofrece como un puente que permite situar el proceso creativo en un espacio íntimo que potencia y expande el campo de acción de la artista y de los participantes. La obra de arte deja de ser un producto para tornarse una obra testimonial en contexto. Con un acercamiento transversal al territorio, esta estrategia audiovisual va urdiendo un tejido social que da vida a nuevos significados, al mismo tiempo que va develando un patrimonio inmaterial subyacente, relacionado con una cosmovisión ancestral en torno a los misterios de la naturaleza.
Como una suerte de antropóloga sociocultural, pero desde la plataforma artística, indago en un universo de micro sujetos sociales en el contexto de un reparto periférico, casi rural, de la Habana. El valor documental de Relatos Breves nace de esta dinámica de creación colaborativa, relacional, donde el proceso artístico polivalente opera a modo de herramienta epistemológica, de comprensión y de conocimiento de la realidad que se despliega en diferentes líneas de fuerza.
Esta metodología de trabajo resulta un aporte al ámbito del arte contemporáneo. Un modus operandi creativo que da luz a una arquitectura donde las interacciones humanas en su contexto social y en tiempo real adquirieron su forma. Los videos en su estética transitan desde este terreno testimonial hacia fibras más imaginarias y poéticas, con algunos toques experimentales.
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Diosne, Homero, Eddy e Hidekel
Diosne, Homero, Eddy e Hidekel, los primeros participantes de Relatos Breves, tienen en común el amor y el trabajo en torno a la tierra, pero cada uno desde un terreno diferencial: un hilo conductor que fue decidido a priori como eje fundamental del proyecto. Archivos de semillas, plantas para alimentar naturalmente a los animales, el conocimiento del poder mágico-religioso de Papa Loko, secretos que animan la naturaleza desde la herencia religiosa africana, aspectos ecológicos, la memoria de la revolución entretejida con la transmisión oral –legado de los guajiros– del uso medicinal de las plantas, exquisitos licores de las más diversas plantas medicinales, vínculos con el pasado, con la esclavitud: Relatos Breves devela terrenos que conforman historias e imaginarios que cada participante porta en sí. Por eso, los diálogos se han trascrito intentando respetar las voces de los participantes, con su modo directo, sin pretensiones, simples relatos breves que dan luz a las imágenes que fuimos creando juntos.
Dentro del proyecto global, el libro Relatos Breves es una parte esencial. Y, gracias a la adjudicación del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes FONDART, ámbito regional de financiamiento, Convocatoria 2022, este libro que ya existía en versión digital, se ha podido concretar en formato impreso. Una edición especial que ha sido diseñada y pensada como un objeto híbrido: como un libro con doble funcionalidad. Además de dar cuenta del proyecto global, este libro es una suerte de herbolario íntimo que –en un movimiento que va desde la planta medicinal o mágico-religiosa hacia la vida de la persona y desde la vida de la persona a la planta– sin pretensiones de ser medicinal en el sentido estricto del término, viene a revitalizar un cierto conocimiento oral, amenazado por algunas de las fuerzas fagocitarias de la globalización y se nos ofrece como un objeto de transmisión para generaciones futuras.
Pero también ofrece una mirada poética y ética, donde las fuerzas visuales que se desprenden del proyecto se integran a la investigación en torno a los secretos de la naturaleza. Y, en tiempos tan distópicos como los que vivimos, en el marco de la actual crisis ecológica global que atravesamos, el libro Relatos Breves se constituye como una suerte de micro utopía que trasciende las fronteras cubanas e intenta dar luz y difusión a estas voces que, dado el complejo contexto actual, adquieren una cierta relevancia.
La curadora e investigadora chilena Luz Muñoz expresa en su texto “Emerger en tiempos de emergencias”, escrito especialmente para el libro:
«En los últimos diez años, Cuba ha sido un lugar recurrente de la experiencia vital y artística de Mariella Sola, una travesía que ha tenido como eje los procesos colectivos a través de laboratorios nómades y prácticas investigativas que se han expandido más allá de los márgenes del arte. Uno de los aspectos más reconocibles en el desarrollo de sus proyectos ha sido la escucha, una práctica éticamente cuidada, tanto en los abordajes poéticos como políticos de sus exploraciones en contextos específicos, donde ha encontrado una fuente de aprendizajes, experiencias y afectos, frutos del re-conocerse con el otro en la acción metafórica de caminar juntos».
Más allá de la inscripción del proyecto en el discurso artístico contemporáneo, existe un compromiso en tanto artista que me vincula con los tiempos que vivimos, que me obliga a repensar mi práctica artística y a dar una mirada diferencial a las relaciones que podemos establecer con la realidad: con los otros y con la naturaleza. En este sentido, el rol que el artista pueda tener en nuestras actuales sociedades en crisis me incita a buscar otro tipo de discursos y acercamientos al arte, creando objetos más híbridos y en un cruce de lenguajes. Un intento en dar lugar a nuevos paradigmas de creación que expandan los límites y los espacios convencionales del arte contemporáneo y, también, a las energías regenerativas de la tierra. Como un nuevo modo de entender lo estético, que apoye e inspire pensamientos en torno a la sustentabilidad de la vida en nuestro planeta y a nuevas alianzas con otros discursos proyectadas desde la plataforma artística para ayudar a crear un necesario futuro en mayor equilibrio.
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Diosne, su particular paraíso
Al entrar en su casa, Diosne nos cautiva con el paraíso personal que ella ha pintado en las paredes de su sala principal. Con un inhabitual eclecticismo y una factura muy personal, este fresco es un precioso tesoro que ella comparte alegremente con los que entran en su vida.
En Diosne se entrelazan los recuerdos de su juventud cuando ella alfabetizó a los guajiros y aprendió junto a ellos el uso de muchas plantas medicinales en el Escambray. Este pasado es uno de los pilares fundamentales de su vida: Como en el monte no teníamos dinero, no teníamos nada, sólo podíamos curarnos con las plantas medicinales, ahí? aprendí? el uso de ellas con los guajiros.
El aura de fuerza e integridad que emana de Diosne se vincula con ese pasado y con esa comunicación tan particular que ella establece con los otros y con el poder de la naturaleza. Actualmente, ella continúa con una dinámica comunitaria de carácter más inntimista: dando masajes a sus vecinas del barrio que ella ofrece a modo de trueque con cosas simples de consumo esencial como el café, arroz, etc. Estos masajes curativos tienen lugar en un contexto de ayuda mutua y de mucha complicidad femenina. Escenas simples, bellas, muy alejadas de toda práctica de una economía de mercado.
Lejos de pretender caer en lugares comunes o en fáciles apologías –más en tiempos de graves crisis sociales en el mundo y en Cuba– este relato es el fruto del imaginario de Diosne: sus visiones, y sus memorias entretejidas al aprendizaje del uso de las plantas medicinales. Su pertenencia a la tierra y sus conocimientos entran en resonancia con el trabajo colaborativo establecido entre Diosne y la artista.
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Hidekel, el espíritu del bosque
Hoy la naturaleza está siendo destruida y devastada por los mismos hombres, y cuando la necesitemos en el futuro no la vamos a tener para nuestro bien. Nos vamos a quedar solos.
¿Por qué destruimos los bosques si ahí habitan árboles tan bellos, tan poderosos?
Hidekel
HIDEKEL es el antiguo nombre, en hebreo, del río Tigris en Mesopotamia: donde los dioses del cielo plantaron un jardín llamado Edén. Como si hubiera decidido rendirle honores al nombre elegido por sus padres, parece haber trazado su vida en el cauce de este río, Hidekel.
Apasionado por el aspecto sagrado del mundo y de la naturaleza; luego de años de búsqueda encontró en el Vudú un marco religioso que le permitió decodificar estos secretos, y darle un sentido y ordenamiento a esta pasión. Muy lejos de los estereotipos que se puedan tener del Vudú, Hidekel nos brinda una dimensión religiosa más amplia e integradora; dando paso a una mirada más humanista y ecológica sin perder de vista nuestro mundo contemporáneo en crisis.
Con sensibilidad nos devela un mundo regido y ordenado por las fuerzas espirituales de la naturaleza, donde Grand Bois y Papa Loko —que se corresponden a Ossain en la tradición afrocubana Yoruba— son guardianes y detentores de un gran poder y conocimiento espiritual ligado a las fuerzas de lo natural. Hidekel establece un puente entre estas tradiciones —poderosas herencias y estrategias de resistencia que nos vienen de los tiempos de la esclavitud— con el cultivo de la tierra y el poder curativo de las plantas medicinales.
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Homero, un archivo de semillas
Homero vive solo en los márgenes de San Agustín, anclado en una vida en comunión con la tierra, sus animales y sus sembradíos. Cruzamos la avenida principal de San Agustín con su frenético y ruidoso fluir de autos, caminamos unos minutos por un sendero y de pronto llegamos a otro tiempo y espacio: la Finca Ecológica Suburbana El Pilar.
Homero con su trabajo ha conseguido preservar un amplio archivo de semillas de diferentes plantas para alimentar de manera ecológica y natural a sus animales. Esto ha sido posible gracias
a su amor por la naturaleza, sumado a un estudio de la bibliografía adecuada y a la observación empírica de sus animales. Él comienza a nombrar las plantas de sus sembradíos y a enumerar una serie de beneficios que cada una de ellas otorga a la alimentación de sus animales con una pasión y velocidad inesperadas : Yo leí todos los libros que se editaron sobre este tema y luego observé lo que mis animales comían, fui constatando cuales eran las plantas que figuraban en los libros y que se correspondían a aquellas que los animales se procuraban naturalmente, fui haciendo mis cultivos y creando mi archivo de semillas.
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Eddy, su patio familiar y la transformación
Eddy heredó de sus padres una dependencia y amor hacia el cultivo de la tierra, ya que el sustento familiar provenía de la venta de lo que se producía en ella, y aunque luego se instalaron en la ciudad, él mantuvo vivo este nexo con el campo. Después al mudarse a San Agustín tuvo la posibilidad de tener un patio con las dimensiones apropiadas para retomar el cultivo de la tierra. Posteriormente se insertó en el movimiento de la Agricultura Urbana, que en Cuba ha sustentado el desarrollo agrícola tanto en las ciudades como en la periferia, y también en los patios familiares de las personas que se dedican a cultivar frutales y plantas medicinales.
En cuanto al conocimiento de las plantas medicinales, Eddy lo ha adquirido fundamentalmente de manera autodidacta, buscando la bibliografía y la literatura adecuada: Tomas Roy es uno de sus referentes preferidos. Él ha desarrollado una mini-industria familiar donde elaboran de manera artesanal y ecológica, aliños, vinagres y exquisitos licores de las más diversas plantas medicinales y aromáticas que él mismo cultiva. Este vínculo con el cultivo de la tierra y la transformación de lo que ella produce –como una suerte de alquimista– es lo que le da sentido y pasión a su vida.
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Relatos Breves, como proyecto global, nos abre a una mayor conciencia de amor hacia la naturaleza, y nos permite vislumbrar el misterio y el poder que ella encierra. Alejándome un poco de lo que es mi habitual línea de trabajo, este proyecto responde, también, a un interés por retratar y dar valor a modos de vida alternativos, vividos con pasión y con una cierta dosis de felicidad, en un contexto marcado por las carencias materiales, pero donde los nexos comunicacionales con los otros y con la naturaleza tienen una gran fuerza y valor.
En la Fototeca de Cuba, en La Habana, se han exhibido las fotografías, los dibujos, los videos y el libro en su edición en papel desde el 14 abril hasta el 16 de junio de este año. Además, se ha presentado en el mes de mayo el proyecto global con sus videos y el libro en la Galería Corral Falso y en el Museo de Guanabacoa de La Habana, Cuba. El 14 de junio se presentó el libro y el proyecto global en la Uneac de Matanzas, Cuba. Y, en el segundo semestre del 2023, Relatos Breves será exhibido en los meses de noviembre y diciembre en BiblioGam del GAM, en Matucana 100 y en el Centro Cultural La Moneda; emblemáticos espacios de arte y cultura de Santiago de Chile.
Por último, es importante mencionar que el proyecto lleva implícito en su formato de creación –gracias a múltiples estrategias de difusión tanto virtuales, como materiales– un impacto y una llegada a diferentes niveles. Pues, además de estar dirigido al público especializado en arte contemporáneo, el proyecto da acceso a un público general con un sentido de inclusión doblemente transversal, es decir, en términos generacionales y sociales. El libro será de distribución gratuita y su sitio web estará abierto a todos.
En términos de divulgación y de conservación especializada del libro, se destaca su integración en los acervos de centros de documentación de las principales instituciones de Arte Contemporáneo en Cuba y en Chile. Este objetivo forma parte del proyecto global.
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Relatos Breves ha contado con el apoyo del Ministerio de Cultura, del Centro Nacional de las Artes Plásticas CNAP y de la Embajada de Chile en Cuba. Y, ha sido financiado gracias a la adjudicación del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes FONDART, ámbito regional de financiamiento, Convocatoria 2022 para lo que fue la impresión del libro y en su Convocatoria 2023, para la circulación de obra internacional y presentación de la misma en Cuba.
Relatos Breves: Acceder al Libro y Videos del proyecto
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