Soy Julia Amigo y me encuentro de vuelta en mi Granada natal (España) después de vivir dos años en Reykjavík (Islandia).
Escribo desde hace unos cuatro años en distintos medios de manera no remunerada, colaborando con proyectos que me interesan e inspiran por su activismo y/o su apuesta periodística y cultural. Además, en el plano académico, me encuentro cursando un doctorado en estudios de género en la Universidad de Granada, investigando el tatuaje contemporáneo desde la antropología del cuerpo y el feminismo. También tengo un blog propio donde vuelco entradas de diversa índole, desde ficción hasta anécdotas y reflexiones más personales.
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Auto-aislación
Estoy aprendiendo a escuchar el silencio, a dejar que la vida fluya a mi alrededor sin esperar tanto de los días. Me sorprendo más relajada, al haberse cancelado cursos y compromisos, y también menos presionada por crear. No puedo forzarme a escribir ya que a menudo suelo hacerlo en cafeterías o bibliotecas, así que dejo que la cotidianidad y el contacto con las personas con quien paso el confinamiento me vayan inspirando y guiando.
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Mi actividad artística durante la pandemia
Mi inspiración fluctúa enormemente estos días. Hay veces en que miles de palabras toman posesión de mi cerebro y tengo que darles calma volcándolas en el papel o la pantalla. Hay veces en que transcurren días o semanas sin que ninguna idea nueva llegue. El obstáculo sigue ahí, pero me ha ayudado resignarme y entender que en situaciones extraordinarias no merece la pena intentar reproducir las lógicas de productividad que suelen regir el mundo.
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Fortalezas y debilidades personales y colectivas
Me doy cuenta de que no necesito producir tanto, o preocuparme por producir tanto. Me siento más satisfecha con mi trabajo, con lo que escribo, cuando dejo que surja desde un lugar de libertad, cuando me presiono menos para crear.
Disfruto de privilegios, como por ejemplo disponer de una casa con terraza, así que reflexiono mucho sobre mi situación para no aislarme también de realidades alejadas de la mía. Me gusta conversar con mis amistades y poner en común con ellas pensamientos sobre el momento que estamos viviendo. Conocer realidades distintas a la nuestra y tender la mano y abrir las orejas a ellas me parece imprescindible.
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Datos o herramientas que puedan ayudarles a otros artistas
Haz cosas que disfrutes siempre que puedas. Cuando nuestra mente está despierta gracias a las creaciones de otras, se genera una especie de contagio. No existen las musas, más bien existen los espejos artísticos en que mirarse, aquellos que nos despiertan del letargo creativo, nos vuelven más conscientes y nos hacen cuestionarnos nuestra limitada parcela de realidad.
También me parece muy importante informarse de manera responsable, conocer historias personales detrás de los números, prestar atención a otras noticias y no encerrarse en el pensamiento estanco de que éste es un momento único, como si se tratara de un paréntesis. El mundo no se ha parado, tan solo partes de él a las que estábamos muy acostumbradas.
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El mundo que nos espera…
Espero que sea un lugar más habitable, más consciente de sus riquezas sociales y culturales y menos preocupado por el consumo sin sentido o la productividad capitalista. Aunque pienso que, para que todo de un giro, necesitamos garantías sociales, apoyo al comercio local o apuestas valientes por un modo de vida más sostenible y solidario.
Julia Amigo @ursulauniverso
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